- No ventilar más de 5 minutos, tiempo suficiente para renovar el aire y no incidir en la inercia de la vivienda.
- Hacer uso de termostatos modulantes.
- En las horas no calefactables, no permitir que la vivienda baje de los 18ºC. Una temperatura que puedes tomar como referencia son 21-22ºC por el día y 18-19ºC por la noche.
- Dejar espacio sobre y alrededor de los radiadores (no taparlos) para favorecer una correcta transmisión y distribución del calor.
- Se recomienda no poner muebles o sillones justo enfrente de los radiadores, ya que esto entorpecería la distribución equilibrada del calor. Si se trata de suelo radiante, hay que pensar en un mobiliario que no ocupe una superficie mayor al 15% para permitir la distribución del calor.
- Realiza un buen mantenimiento, comprobar periódicamente que las distintas tomas (agua, gas y electricidad) de la caldera están en perfectas condiciones.
- Revisa la presión. Lo ideal es 1,2 bar, con un margen superior o inferior del 25%. También debes purgar los radiadores, al menos, una vez al año, puedes hacerlo tú mismo.
- Regula la temperatura. Cualquier manual sobre cómo ahorrar en calefacción con tu caldera de condensación hará especial hincapié en este punto. Aunque puede ser algo mayor en zonas frías, la temperatura ideal sería de 60ºC-70ºC, en el caso de radiadores, y entre 40ºC-50ºC si es suelo radiante.
Esperamos que nuestros consejos para ahorrar con tu calefacción hayan sido útiles.